• La Cámara Colombiana de la Energía hace un llamado al Gobierno Nacional para dar solución al problema energético en el Caribe
Desde la Cámara Colombiana de la Energía-CCEnergía vemos con gran preocupación la situación energética actual por la que atraviesa la Costa Caribe.
De acuerdo con los últimos indicadores Saidi, publicados por la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios que miden la duración de la interrupción en el servicio de energía, las ciudades de la costa Caribe con mayor número de horas de desconexión fueron Montería 97,1; Riohacha 74,2; Barranquilla 67,8 y Santa Marta con 64,4 horas cuando el promedio nacional fue de 26,7 horas al año y las ciudades con los menores indicadores fueron Tunja y Medellín con 4 y 4,2 horas al año respectivamente.
El Saifi es un indicador de frecuencia que mide el número de interrupciones del servicio de energía al año, mostró que las ciudades más afectadas son Montería 84,9; Santa Marta 75,3; Riohacha 62,8 y Barranquilla con 51,2 interrupciones de servicio de energía en el año 2017. En este caso el promedio nacional fue de 37 interrupciones y las ciudades con menor indicador fueron Medellín y Popayan con 7,5 y 7,6 interrupciones en 2017.
Como se observa en estos indicadores, los usuarios de Electricaribe no cuentan con un servicio estable y de calidad y debido a los constantes apagones se están ocasionando pérdidas millonarias, no solo en los negocios por el daño a equipos de trabajo, sino en los hogares con la avería de electrodomésticos, afectando la calidad de vida de los habitantes de la región por la deficiente calidad en la provisión de un servicio público de primera necesidad.
Por otro lado, la subasta de activos en la que se definiría el nuevo operador del mercado de distribución y comercialización de energía eléctrica para la Región Caribe, programada para octubre fue aplazada para diciembre, debido a que algunos de los posibles ofertantes solicitaron más tiempo para analizar las condiciones y la viabilidad del negocio.
Entendemos desde nuestro gremio que las empresas interesadas deben estar seguras de la inversión que realizarán en este proceso, pero desde la Cámara Colombiana de la Energía hacemos un llamado al Gobierno Nacional y al Ministerio de Minas y Energía para que no vuelva a postergar la elección del nuevo operador, ya que la Región Caribe requiere de una solución inmediata frente al servicio energético que realmente necesita para el desarrollo, productividad y competitividad de la Región.